Los autónomos incrementan sus rentas declaradas vs autónomos por obligación
Los rendimientos que declaran los autónomos en el IRPF han aumentado por primera vez desde 2007. Segun los datos facilitados por la Agencia Tributaria, que corresponden al ejercicio 2014 y que se declaran en 2015. El rendimiento neto por actividades económicas se situó en 9.591 euros, un 6,4% más que el ejercicio anterior.
Más de 1,6 millones de contribuyentes declararon en el IRPF rendimientos por actividades económicas. En este grupo se ubican sobre todo los autónomos, emprendedores y profesionales, cuyos ingresos declarados se han derrumbado en los últimos años. En 2007, el rendimiento neto medio para los empleados por cuenta propia que tributan por estimación directa ascendió a 13.525 euros. Desde ese nivel, cayó cada año hasta situarse en 9.011 euros en 2013. Dicho de otra forma, la renta media declarada por actividades económicas se redujo un 33,3% en seis años.
La tendencia se rompió finalmente en 2014, cuando por primera vez en seis años los beneficios de los autónomos volvieron a aumentar. El rendimiento neto reducido –una vez aplicadas las bonificaciones que contempla la ley, se situó en 9.591 euros, un 6,4% más que en el mismo período del año anterior. Este incremento no se reflejó en la principal fuente de renta, que son los rendimientos del trabajo. Los ingresos declarados por los asalariados ascendieron a 21.821 euros, solo un 0,2% más. Una vez aplicadas las reducciones que contempla la ley y descontadas las aportaciones a la Seguridad Social, la renta declarada asciende a 18.873 euros. La cifra es muy superior a los 9.591 euros declarados por los autónomos.
Hay que tener en cuenta que, a diferencia de los asalariados, los trabajadores por cuenta propia pueden deducirse los gastos inherentes a su actividad. Ello les permite rebajar la factura tributaria.
Funcionarios de Hacienda defienden que el bajo nivel de ingresos declarados por los autónomos es un reflejo del fraude fiscal.
En cambio, los autónomos señalan que son un colectivo que ha sufrido con especial virulencia los efectos de la crisis y recuerdan que la recesión se ha llevado por delante a numerosos profesionales y multitud de pequeños negocios.
No deja de ser cierto a nuestro enteder que, aplicándo reglas matemáticas básicas, efectivamente las cifras no cuadran, de tal manera que es probable un alto fraude con algunas de las actividades realizadas por los autónomos.
También es cierto, que muchos en este periodo de crisis, han perdido absolutamente todo y ello debido a una doble situación: la pròpia de un contexto de crisis y la falta de “cintura” de la legislación vigente por lo que se refiere a este colectivo.
Recordemos un poco el origen de los “autónomos”, ¿ no fue para revertir las altas tasas de paro hace ya muchos años ? ¿ no fué para tenir unes tasa de paro homologables a nivel Europeo ?
Finalmente según un estudio de Adecco e Infoempleo, un 41,8% de los autónomos encuestados reconoce haberse convertido en autónomo por necesidad.
Quizá ese sea uno de los motivos que expliquen que 7 de cada 10 profesionales prefiera tener un trabajo por cuenta ajena a tiempo completo que seguir siendo autónomo. La principal razón que esgrime este 65,5% de autónomos que preferiría trabajar por cuenta ajena es la tranquilidad y mayor seguridad que aporta estar empleado frente a liderar tu propio negocio. Especialmente si ello ha sido debido, no por vocación, sino de manera forzada por las circumstáncias.
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